Invierno de 1950. En la gélida región del lago Changjin de Corea del Norte, comienza una sangrienta batalla entre Estados Unidos y China. Pese a las condiciones climatológicas extremas, la falta de alimento y la gran diferencia de armamento, las tropas chinas avanzan con espíritu intrépido y voluntad de hierro en la que fue una de las batallas más violentas de la Guerra de Corea.
Es la sinopsis de la espectacular, tanto por el despliegue de un impresionante diseño de producción que sin duda permitirá incluir La batalla del lago Changjin en el Olimpo del cine bélico como por el nivel interpretativo de Wu Jing (Wolf Warrior), Jackson Yee (Better days) y Duan Yihong.
Esta super producción china, hasta la fecha la más taquillera de China con más de novecientos millones de dólares recaudados, está codirigida por los prestigiosos realizadores Chen Kaige (Adiós a mi concubina), Dante Lam (The rescue, equipo de rescate) y Tsui Hark (trilogía Érase una vez en China, Detective Dee y el misterio de la llama fantasma).
Lo que suponía un paseo militar para los estadounidenses, tras su rápido e imparable avance desde su entrada en el Pacífico con la IIGM se tornó, sobre todo a raíz de este desastre bélico, en el inicio de su pesadilla. Un mal sueño que culminará con la larga, cruenta y vergonzosa guerra de Vietnam que, no obstante, nos ha dejado la joya del cine bélico (e irónicamente muy humano) Apocalypse Now. Desde Beat4people os recomendamos, además de ver La batalla del lago Changjin en cines (a partir de este viernes 8 de julio), ver esta otra obra maestra de Francis Ford Coppola cuyo rodaje supuso un infierno con un reparto excepcional encabezado por Martin Sheen y Marlon Brando.
En ambas películas, el honor, la resistencia, los sentimientos humanos ante las terribles consecuencias de la guerra se ven muy bien reflejadas, si bien desde dos puntos de vista totalmente diferentes, el occidental y el oriental. Es uno de esos films que merece la pena ver en cines para disfrutar (y sufrir, en el buen sentido) la experiencia bélica sin distracciones y sentirse envuelto en el frío infierno en el que se convirtió esa región del lago Changjin en 1950. Una batalla cuyos ecos, al igual que la infame Guerra Fría, por desgracia perduran hoy en día.
Un filme, en definitiva, en el que la maestría cinematográfica (incluida la banda sonora) conjuga el valor, la épica y el drama haciéndolo de obligado visionado a partir de este viernes 8 de julio para los amantes del género bélico y los historiadores.
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